Grullas Sobre Dorado
Técnica: Acrílico
Ubicación: C/Enrique Urrutikoetxea – Sopela (Bizkaia)
Fecha: 2022
Longitud: 110 metros lineales.
Altura: 3,5 metros.
Superficie: 294 metros cuadrados.
Inspirado por la pintura tradicional japonesa, en el que el detalle y la composición de aves y flores se desarrolla sobre fondos dorados en abanicos, telas y principalmente biombos, que son auténticas obras de arte.
Desarrollar esta idea en una pared de hormigón, dividida en casetones rectangulares, podría ser un inconveniente, pero también puede recordarnos a aquellos biombos tradicionales, transformando un paisaje oscuro y suburbial que una experiencia sensorial y poética.
“Grullas sobre dorado” es un mural envolvente formado por tres paredes que suman casi trescientos metros cuadrados y 111 metros lineales, transformando un área urbana degradada en un espacio donde evocar otros lugares, otras culturas… y dar paso a la poesía, en un espacio sorprendente y armónico que se funde con los jardines que lo rodean, formando parte de la propia obra.
Los tres murales conforman el ciclo vital de las grullas y en cada uno de ellos se puede contemplar una etapa concreta de este ciclo, desde el cortejo y la crianza hasta las multitudinarias colonias que se reúnen por miles y el inicio de sus largas migraciones.
La grulla japonesa es la más reconocible de su especie por su vistosa corona roja sobre una capa de plumas blancas, según algunas leyendas, la grulla es el pájaro más antiguo de la tierra y siempre ha capturado la imaginación humana con su belleza, elegancia e inteligencia.
La grulla inspiró cuentos y leyendas en los que protegía a las personas con su abrazo y las transportaba a terrenos espirituales más elevados, junto con el Fénix, la grulla es el pájaro más poderoso y que mejor representa la buena fortuna. Es el pájaro de la inmortalidad y se identifica normalmente con los atributos de la longevidad, la paz y el viaje sin sobresaltos, ya que la grulla, es la única ave que vuela hacia su destino sin hacer ninguna parada durante sus migraciones, haciéndolas dignas de admiración desde muy antiguo y en muy diversas culturas, es por ello que se las conoce como “las aves de la felicidad”.